Capitulo 54º


Camila no quiere que busquen la carta en el palacio, insiste en que es peligroso y amenaza a Ricardo que si lo hace, al día siguiente se entregará

Camila pregunta a Ricardo si cree que Foreman fue a ver a Alberto y a Jorge. Él dice que seguro debe de comprarles la plata. Ella comenta que si es así, los denuncie con su padrino y consiga el perdón. Ricardo no tiene pruebas, dice que hay que esperar a que alguien los comprometa y esa puede ser Lisabeta.

Lisabeta cuenta a Francisca que Alberto no le regresó la carta porque se la va a dar a Don Eustaquio de la Oca, juez jurisdiccional de San Fernando.

Ricardo sale de la casa cuando Mario y el Güero regresan de su viaje. Mario le cuenta de la muerte de Bernabé, llegan a la conclusión de que fue Alberto quien lo mató y debe tener la carta.

Ricardo llega a la posada a visitar a Foreman, que lo recibe afectuoso, le pregunta cuándo conoció a Lafont y Foreman dice que apenas. Ricardo lo invita a comer a su casa, llega Alberto y todos fingen. Foreman le cuenta a Alberto que Ricardo lo invitó a comer a su casa para presentarle a su esposa. Alberto le dice que a Jorge también le dará gusto conocerlo.

Foreman admira el palacio, Alberto le pregunta si Ricardo es quien dice ser, pues sospecha que es Salamanca. Foreman se sale por la tangente, llega Jorge, lo saluda y finge no saber quién es, luego llega Úrsula, Foreman y ella intercambian miradas de coqueteo.

Ricardo, Mario y Pablo se dirigen a casa de Alberto, van hacia la parte trasera. Mario se hace el borracho y noquea al peón de guardia. Ricardo y Mario entran a la casa, mientras Pablo sigue vigilando afuera. Alberto regresa a su casa. Ricardo y Mario no logran salir antes de que él entre a su recámara, por lo que Ricardo le da un golpe en la nuca y lo desploma.

Ricardo y Mario regresan a su casa, cuentan a Camila que no encontraron la carta. Tal vez Bernabé la destruyó o ya la tiene Jorge. Camila no quiere que busquen en el palacio, Jimena les recuerda que Vasco tiene llaves para entrar. Camila insiste en que es peligroso y amenaza que si lo hace, al día siguiente se entregará. Ricardo se la lleva a otra habitación y la deja ahí encerrada. Camila grita que la saquen y golpea la puerta, por lo que Lisabeta y Francisca despiertan.